La PIEL también tiene horarios. Los ciclos circadianos.
¿Conoces el concepto de cronocosmética? ¿Por qué hay productos cosméticos que deben utilizarse por la noche? ¿Cuándo se produce el momento de regeneración celular? Quizá nunca lo hayas pensado, pero la cosmética está muy relacionada con los ciclos circadianos. Si quieres saber más sobre esto, ¡este artículo te interesa!
Empecemos por el principio: los relojes biológicos son mecanismos internos que tenemos los seres humanos que conectan las células de todo el cuerpo. En primer lugar, podemos hablar de un “reloj principal” en el cerebro, que coordina todos los relojes del cuerpo que están sincronizados. Este “reloj principal”, también llamado «reloj maestro» controla los ritmos circadianos, consiste en un grupo de neuronas en el cerebro que se llama núcleo supraquiasmático o NSQ.
¿Qué es un ciclo circadiano?
El término circadiano se deriva de las palabras latinas circa y dies, las cuales traducimos como “alrededor del día”. Los ciclos circadianos son cambios físicos, mentales y conductuales que siguen un ciclo aproximado de 24 horas y que responden, principalmente, a la luz y la oscuridad en el ambiente de un organismo. Nuestra piel sufre modificaciones químicas y estructurales durante las 24 horas del día en función de los cambios de luminosidad. La piel también tiene horarios.
Cuando envejecemos, la precisión del reloj biológico tiende a perderse de forma progresiva con cambios en nuestra estructura cutánea: pérdida de firmeza y luminosidad, deshidratación, manchas pigmentarias… ¿Ya empiezas a ver la relación entre cosmética y ciclos circadianos?
¿Qué es la cronocosmética?
La cronocosmética es una técnica cosmética muy avanzada, que trata de optimizar las propiedades de los activos utilizados en sus fórmulas, en función de si aplicamos los cosméticos durante el día (ayudando a proteger la piel de las agresiones externas y estimulando el sistema de defensa endógeno) o por la noche (regenerando la piel dañada activando los mecanismos de reparación). Y en KOSMETAI utilizamos esta técnica para poder optimizar al máximo todos los beneficios que nos aportan los activos que utilizamos. Por ejemplo, en el caso de nuestro cremigel anticelulítico intensivo es fundamental que su aplicación sea antes de ir a dormir, ya que modula la proteína circadiana «nocturnina». Se activa según los ciclos circadianos día-noche, para reducir los depósitos de grasa aumentando la lipólisis e induce la síntesis de Colágeno Tipo I. Así, alisa y mejora la firmeza de la piel. Otro ejemplo, sería la crema nutritiva de noche de KOSMETAI, que aporta lípidos que sirven de reserva energética para prevenir el envejecimieno y la formación de arrugas. Se aplica por la noche para reparar la piel de las agresiones sufridas durante el día, al mismo tiempo que la regenera y renueva mientras duermes.
¿Conocías el concepto de cronocosmética? ¿Consideras importante la relación entre la cosmética y los ciclos circadianos? ¡Cuéntanos tu opinión!
